Son muchas las recetas que tienen vino blanco entre sus ingredientes. Almejas en salsa, una receta de osobuco al vino, o pollo Marsala son algunas de ellas, pero hay muchas más. Esto es porque el vino blanco trae equilibrio, fuerza y acidez a muchas de nuestras recetas favoritas.
Una vez que introduces un vino blanco de precio moderado en la ecuación (obviamente hay que dejar los vinos caros en la nevera), las posibilidades y el estilo de cocina se expanden exponencialmente.
Pero no todos los vinos blancos son recomendables para utilizarlos para la cocción, por eso en este artículo te vamos a recomendar los mejores para cocinar con ellos.
De lejos, el estilo más versátil de vino para cocinar es un vino blanco seco. Los blancos ricos en roble pueden llegar a ser amargos durante el proceso de cocción, mientras que los blancos más dulces pueden caramelizar o agregar el dulzor indeseado a ciertos platos.
Cuando se cocina con el vino, se convierte en una parte integrada del todo, y los matices sutiles se pierden casi siempre, por lo tanto, un vino de calidad sólo se utiliza adecuadamente para terminar un plato, donde será el componente destacado. A menos que sea el caso, elige un vino con un precio moderado.
Si es posible, elige un vino que tenga un contenido moderado de alcohol (idealmente entre 10 y 13 por ciento) y una acidez generosa. ¿Por qué? Los vinos altamente alcohólicos tienden a tomar más tiempo para reducirse y, a menudo, no tienen la acidez necesaria, lo que añade brillo, mientras que ablanda.
Mis tres variedades favoritas de uva para cocinar son Pinot Grigio, Sauvignon Blanc, y Chardonnay. Pinot Grigio es el más neutro de los tres, lo que lo convierte en el más versátil. El Sauvignon Blanc proporciona una acidez racional, que es particularmente deliciosa en platos de mariscos o con salsas que utilizan nata. El Chardonnay aporta la mayor riqueza de los tres.
Jerez
No puede faltar una botella de Jerez en mi cocina, justo esta mañana preparé una olla de sopa de pollo y coliflor con una pizca de jerez, que iluminó la sopa y añadió una capa de profundidad y dimensión. El Jerez es muy versátil, es perfecto para las carnes, salsa y mariscos, pues aporta mucha profundidad. Marsala
El clásico plato pollo Marsala está elaborado con este vino fortificado y dulce. Mi forma favorita de usar el vino Marsala es en el postre italiano zabaglione.
Vino Espumoso
El vino espumoso es perfectamente adecuado para una vinagreta o un sorbete de champán, y resulta un gran sustituto para el vino blanco seco en beurre blanc. Las burbujas se disipan cuando se cocinan, por lo que es una gran oportunidad para usar el sobrante de fiestas. Mi preferido es el cava. Madeira
Madeira es un vino portugués de las islas de Madeira. Puedes utilizar este vino en la salsa para solomillo Wellington (todas las recetas de solomillo Wellington están en solomillowellington.com), o como un sustituto del Jerez en prácticamente cualquier receta. Mi vino favorito es Duque de Sussex.
